diumenge, 26 d’abril del 2020

Los verdaderos héroes y heroinas

Hoy, domingo 26 de Abril, es un día histórico en nuestro país. 

Casi dos meses después del inicio del Estado de Alarma en España, los niños/as vuelven a salir a la calle, y no hay mejor día que hoy, para volverme a sentar a escribir frente la pantalla de mi ordenador. Esta vez, es más especial si cabe. En estos momentos, me encuentro en el balcón de mi casa, con un poleo calentito, y de fondo suenan los acordes de la mejor canción de la historia. Melodía compuesta por los más pequeños y pequeñas de nuestras casas, familias, calles, barrios, pueblos, ciudades... 

Hace unos días, varias personas me preguntaron sobre mi opinión entorno a la salida de los niños/as a la calle durante la famosa cuarentena. Pues bien, hoy voy a hablar del tema. Creo que ha llegado el momento de hacerlo. 

Todos sabéis mi pasión por la infancia y la educación. Soy una persona que defiende los valores y derechos de los niños/as, y durante esta situación todavía más, pero también sé aceptar y ver los errores que muchas veces se comenten, la mayoría de ellas por falta de responsabilidad. 

Nos equivocamos si pensamos que el gobierno les deja demasiada franja horaria para salir. Señores y señoras, llevan casi dos meses encerrados entre cuatro paredes, sin estirar las piernas, respirar aire puro, correr, pegar cuatro gritos, sin ver a sus amigos presencialmente y no a través de pantallas con las famosas videollamadas, que todos estamos haciendo polvo durante estos días. Llevan más de 40 días jugando solos, entre hermanos, o con sus padres, haciendo deberes (muchas veces sin sentido, pero ese es otro tema), para no perder el ritmo del cole. 

Los niños y las niñas son una fuente de creatividad. La potencia mundial en cuanto a imaginación. Pero necesitan un respiro. Necesitan volver a ser y sentirse niños/as.

Permitidme que reconozca a los niños y a las niñas como LOS VERDADEROS HÉROES. Sí, ellos y ellas son los VERDADEROS HÉROES de esta pandemia mundial. 

Muchas personas os comparáis con los niños, y siento no compartir esa idea. Nunca podemos compararnos con una persona que se encuentra en su pleno desarrollo evolutivo y madurativo. Nosotros, ya tenemos herramientas para poder entender, reconocer y vivir en sociedad. Otra cosa es que queramos usarlas y/o entenderlas. Ya hemos vivido experiencias que nos han ayudado en el proceso de aprendizaje vital. Ellos todavia las están creando, y si a los adultos esta pandemia nos ha venido grande, poneros en la piel de un niño/a y mirar con sus ojos. Los niños/as están viviendo una situación, para la que no están preparados en su corta edad. Respetémoslos. 

Después de leer muchos comentarios en redes sociales y ver los famosos videos que están circulando, de la salida de hoy, sigo pensando lo mismo. Creo que plantear un inicio de la tan esperada desescalada partiendo de los niños/as ha sido y es lo correcto. Ahora bien, lo que no es lo correcto es la falta de empatía, responsabilidad, civismo, solidaridad, tolerancia, respeto, humildad... y un largo etc que muchas familias han tenido y seguirán teniendo. NO es culpa de que salgan los niños/as a la calle. El problema viene de la educación y de los valores que hay en las casas. El problema viene de los adultos. 

Como bien comentaba con unas amigas hace un rato, no podemos pretender que los niños/as actúen con la responsabilidad que se les pide, por un bien común y social, si los padres no dan ejemplo. Nosotros, las personas adultas, somos el espejo donde los más pequeños/as se miran. Ellos nos copian, porque piensan que todo lo que hacemos está bien hecho. Así que por favor, empecemos a no mirarnos el ombligo y ser más responsables de nuestros actos, por el bien propio, de nuestra familia, amigos y de la sociedad. 

Es sencillo: CIVISMO, RESPONSABILIDAD, EDUCACIÓN, SOLIDARIDAD Y RESPETO.

Esa es la clave. 

Las medidas sanitarias a seguir para conseguirlo son claras:
1. Un adulto con máximo tres niños (hasta 14 años). SÓLO UN ADULTO.
2. Distancias de seguridad de 2m.
3. Salidas de máximo 1h, y dentro de la franja horaria establecida: 9h-21h
4. No desplazarse más de 1km. ¡¡ NO ES NECESARIO !!
5. No utilizar el mobiliario público (parques, bancos...)


Pero además, por lógica y sentido común, deberíamos de ir todos con mascarillas y guantes, tanto adultos como niños, como medida sanitaria y de seguridad. 

Salgamos a la calle, demos un paseo por el barrio, tomemos el sol, quedemos con algunos amiguitos para que de acera a acera puedan verse y hablar, vayamos a ver a familiares que vivan cerca (eso sí, unos desde la ventana y otros en la calle)... Hagámosles más fácil la cuarentena a nuestros pequeños/as, pero CON CABEZA

Otro tema candente, está siendo que este inicio de desescalada se haya realizado un domingo. Bajo mi humilde opinión, no ha sido un error. Está bien pensado. Los fines de semana, y sobretodo los domingos, son días de conciliación familiar, y es cuando tanto padres/madres e hijos/as, pueden disfrutar juntos. Los nanos necesitan salir con sus padres a la calle, ya que éstos son su referente directo. Y lo necesitan muchísimo más, después de estar encerrados casi dos meses entre cuatro paredes. Ellos son los únicos que les hacen sentirse seguros y capaces de "volver a la normalidad". 

Como he dicho antes, el problema radica en la educación familiar y los valores que los padres transmiten

Estoy segurísima, de que muchos de los niños/as que hoy han salido o van a salir a la calle, tienen más precaución y seguridad que sus propios padres. Pensamos que no saben la importancia de lo que está ocurriendo, y después de la maduración exprés que han experimentado en esos cuerpecitos, lo entienden a la perfección. Incluso han habido rechazos para salir a la calle, propios del miedo y preocupación social que existe. 

Que continue la desescalada, podamos salir de casa, volver a la rutina del trabajo, que no hayan más contagios, ni muertes, ni suba la curva... depende de las medidas de protección sanitarias y de la responsabilidad de cada uno, pero sobretodo, y en este caso, de las familias. 

Debemos de demostrar que estamos capacitados para empezar la desescalada. Tenemos de explicarles a nuestros nanos (si no se ha hecho todavía, cosa que debería de haberse hecho ya...) la situación en la que nos encontramos y lo que ésta conlleva. Los niños/as no son tontos, y lo entenderán, por muchas ganas de jugar con los amigos, de ir al parque, volver a ver a sus compis de clase... que tengan. 

Si queremos hacer las cosas bien, pongamos nuestro granito de arena, pero por favor, NO EN CONTRA DE LOS NIÑOS/AS

Recapacitemos. 



Y no nos olvidemos, LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS SON LOS VERDADEROS HÉROES







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